Un estudio realizado en Barcelona, España, encontró que los clubes cannábicos redujeron el consumo de cannabis en la calle y el tráfico ilegal de drogas en un 90%. Además, los clubes cannábicos han creado empleo y generado ingresos significativos para la economía local. Según un informe de la Asociación de Clubes Cannábicos de Barcelona, los clubes cannábicos generaron más de 150 millones de euros en ingresos en 2019 y emplearon a más de 2,000 personas.

En Uruguay, después de la implementación del sistema de clubs cannábicos en 2013, se observó una disminución en el consumo de drogas duras y una disminución del 30% en los delitos relacionados con el tráfico de drogas. Además, se estima que la legalización del cannabis podría generar hasta 25 millones de dólares anuales para la economía del país.

En los Países Bajos, donde los clubes cannábicos han estado operando desde la década de 1970, se ha observado una disminución del 75% en el número de operaciones policiales relacionadas con el tráfico de drogas. Además, según un informe de la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes de las Naciones Unidas, la tasa de consumo de cannabis en los Países Bajos es significativamente más baja que en otros países europeos, lo que sugiere que el sistema de clubs cannábicos ha tenido un impacto positivo en la reducción del consumo de drogas en la calle..